jueves, noviembre 16, 2006

Preocupa una reforma que estudia Washinghton

(Fuente: Clarín del 11 de noviembre del 2006).

Que Estados Unidos tenga su foco puesto en Irak no significa en absoluto que descuide sus planes para la región. Por el contrario, existe una iniciativa de reforma de la defensa muy poco conocida que encendió alarmas en nuestros países y motivó recientemente un pedido de aclaraciones a Washington por parte de los países del Cono Sur, entre los que se encontraba Argentina.Según esa iniciativa —que se encuentra en el Capitolio para ser tratada— el actual área asuntos hemisféricos de la Defensa de EE.UU., es decir la oficina que trata las cuestiones militares vinculadas con nuestros países, dejaría de existir, y todo lo relacionado con esos temas tan sensibles pasaría a ser tratado como "asuntos internos". Concretamente pasarían a depender de la Office of Homeland Security, una suerte de Ministerio del Interior. En otros palabras, para EE.UU. esas cuestiones regionales no serán considerados como un asunto con países extranjeros sino como cuestiones internas.El tema fue planteado por la ministra de Defensa argentina, Nilda Garré, durante la VII Conferencia de ministros de Defensa de las Américas, que se hizo en Managua a principios de octubre. En esa cumbre, Garré preguntó sobre esa iniciativa al entonces subsecretario de Relaciones Internacionales del Departamento de Defensa de EE.UU., Peter Rodman. Rápidamente el tema despertó la inquietud de los ministros brasileños, uruguayos y chilenos. Esta cronista oyó la misma preocupación de boca de la ministra chilena de Defensa, Vivianne Blanlot, durante un viaje que hizo con Garré a Puerto Williams, Chile.Según fuentes locales consultadas por Clarín, en Managua, la delegación estadounidense buscó calmar a sus colegas latinoamericanos diciendo que la reforma de Defensa no iba en el sentido del que todos temían, y que sólo se trataba de un cambio administrativo. Pero ello no calmó las aguas. Por el contrario, en la conferencia de Managua quedaron claras las enormes diferencias que existen alrededor del concepto de seguridad y defensa entre los países del continente.Otro tema de polémica en la cumbre fue el viejo plan estadounidense de rediseñar los ejércitos regionales y convertirlos en fuerzas casi policiales, para combatir delitos internos como el narcotráfico, el terrorismo o las pandillas delictivas (maras). En este punto coincidieron Estados Unidos y Colombia, cuya delegación polemizó fuertemente con los países del Cono Sur. Argentina no cree que haya que equiparar los asuntos de defensa con los de seguridad y busca limitar el poder militar al radio estrictamente castrense.Por su parte, la Junta Interamericana de Defensa, de la OEA, un foro en el que EE.UU. ejerce enorme influencia, planteó convertirse en el órgano que coordine la agenda de las conferencias de ministros de Defensa, lo que fue cuestionado de plano incluso por el secretario general de la OEA, el chileno Miguel Insulza. "Debemos ser prudentes en restringir nuestras concepciones de seguridad multidimensional a lo que constituyen efectivamente amenazas militares o de seguridad pública", dijo Insulza.

NOTA DE P. DE H: Denunciamos esta aberración que en días más se tratará en EEUU, según la cual, nuestra américa, en el área de defensa, se considerará como parte de EEUU.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy bueno.