miércoles, abril 11, 2007

DE AUSENTES Y DESMALVINIZADORES

(Perón Vence al Tiempo, 10 de abril del 2007. www.peronvencealtiempo.com.ar)


25 AÑOS DESPUES: ¿ESPERANZA?


Por Patricio Mircovich



Cuando arribó al pueblo la noticia que confirmaba la recuperación, por parte del ejército Argentino, de las Islas Malvinas, Georgias y Sandwich del Sur aquel recordado 2 de Abril de 1982, el país a lo largo y a lo ancho estalló en júbilo.

La recuperación de nuestras islas, invadidas allá por el año 1833 por el pirata ingles, aparentaba reconstruir un lazo roto por años de divorcio entre pueblo y ejército argentino. A pesar que a muchos le pese, esto es una gran verdad. Y las imágenes que manifiestan la alegría del pueblo colmando la mítica Plaza de Mayo y clamando de alegría por la recuperación de Malvinas así lo confirman. Ojo, no faltaron en dicha movilización popular las banderas que dejaban en claro la posición del pueblo “MALVINAS SI, DICATDURA NO”.

Así lo confirmaba el pensamiento de infinidad de Organizaciones, Partidos Políticos, Sindicatos, la CGT, Instituciones, etc., etc., que proclamaron públicamente a través de diversos comunicados publicados en varios medios de información la apoyatura a la recuperación de las Islas Malvinas efectivizada por nuestro ejercito argentino.


DESMALVINIZACION

“El fenómeno de desmalvinización es consecuencia de una estrategia que no es nueva, y que se encuentra vinculada a relaciones de poder que se manifiestan ancestralmente en la humanidad, y que dan cuenta de una determinada situación o pretensión colonial. En tal sentido, la reivindicación permanente y persistente de una porción de nuestro territorio, arrebatada unilateral y arbitrariamente, y su posterior tentativa de recuperación, constituyen verdaderos desafíos que, desde cualquier perspectiva colonial, deben ser desnaturalizados - o lo que es mejor aún - condenados al olvido. La epopeya de Vuelta de Obligado acontecida 20 de noviembre de 1845 -por ejemplo-, sufre aún hoy consecuencias similares y pueden encontrarse en la historia de otras naciones sujetas a presiones o pretensiones coloniales, ejemplos análogos.” (Francisco Pestanha)


LA ACTUALIDAD

No es ninguna novedad el embate que deben soportar -por aquellos tiempos pequeños de edad pero hoy reconocidamente inmensos en valor y patriotismo- combatientes de Malvinas. Aquellos mismos héroes –con todas las letras- que pelearon por nuestra soberanía deben continuar combatiendo a la confirmada, hoy 25 años después, maquinaria anti nacionalista que aceita nuevamente los engranajes tratando de tapar lo que indudablemente el pueblo no olvida: LAS MALVINAS SON ARGENTINAS, guste a quien le guste, moleste a quien le moleste.

Podrán criticar la forma, el tiempo y/o el espacio, no así la heroica participación de nuestros grandes soldados que, sin el equipamiento ni las condiciones para enfrentar lo que en ese momento era la tercera potencia bélica mundial, mantuvieron con orgullo el valor de hacer valer los derechos de nuestra Patria.

La solapada decisión de cortar las relaciones diplomáticas con Gran Bretaña a través de un acuerdo petrolero que al día de hoy –entiendan bien- pretende poner en el tapete la cuestión Malvinas, pero aparenta no significar nada por la lucha de la recuperación de nuestra soberanía sobre las islas del atlántico sur, no deja de evidenciar una estrategia de allegados al gobierno por demostrar algo que en realidad no es: la efectiva intención de nuestro gobierno por recuperar las Malvinas.

Pese al evidente esfuerzo efectuado por determinados dirigentes allegados al gobierno nacional, no lograron ocultar el desinterés del presidente por reconocer lo que varios personajes de su entorno no quieren, ni aparentemente les conviene: lo único que hizo bien nuestro ejército luego de años de dictadura es hacer reconocer nuestra soberanía sobre las Malvinas.

Hasta el presidente Venezolano, Hugo Chavez, ha sido más enérgico que el nuestro propio en reclamar la justa recuperación de Malvinas por parte de la Argentina. Hemos llegado hasta estos límites insospechados, o no.


LA COBARDIA DE AUSENTARSE

“El hombre puede desafiar cualquier mudanza

si se halla armado de una sólida verdad”

Juan Domingo Perón



Salvando las enormes distancias entre aquel “oportuno” presidente de la nación y el que constitucionalmente y con todas las de la ley hoy nos gobierna, ambas actitudes parecen describir un mismo comportamiento respondido por una actitud: la ausencia.

No es un descubrimiento el comportamiento de Galtieri acovachado en casa de gobierno presuntamente “dirigiendo” la guerra totalmente ausente en el verdadero teatro de operaciones. Queda en el sentimiento del pueblo una sensación de cobardía por parte del presidente dictatorial. Muchos pensamos que debería de haber sido el primero y el último en abandonar el archipiélago si pretendía que el pueblo realmente crea que lo que estaba llevando a cabo era lo que realmente quería demostrar. Muy a pesar de las consecuencias que pueda llegar a traer la perdida del primer mandatario. Nuestro pueblo ha soportado cinco presidentes en una semana.

Los nobles guerreros argentinos por parte de la dirigencia política el 2 de abril de 2007 estuvieron, una vez más, solos; y aunque parezca mentira pasados 25 años de aquella gesta histórica continúan del mismo modo.

Para nadie que realmente se sienta entusiasta de lo NACIONAL resulta grato el desplante del actual presidente de la nación al pueblo argentino en participar de al menos UN recuerdo de aquella gesta histórica. Y si el desacuerdo del primer mandatario es la recuperación misma, al menos debería de haber participado en el reconocimiento de aquellos jóvenes grandes patriotas que dejaron la vida POR EL PUEBLO, por USTED y POR MI.


EL FUTURO

"No es posible adquirir por medio de la injusticia,

el perjurio y la mentira un poder duradero.”

Demóstenes



A pesar del daño que produce el ausentismo del primer mandatario, los argentinos sabemos perdonar; y la subsistencia de determinados personajes de la política así lo corrobora.

Nuestro combatientes – así es como les gusta que les digan porque aun hoy siguen peleando por recuperar nuestras islas- también sabrán entenderlo, Sr. Presidente. Pero está en usted hacer de esto una Argentina grande, donde ellos, nuestro grandes HEROES DE MALVINAS, puedan vivir confortados y especialmente sabiendo que usted está haciendo todo lo posible por recuperarlas, así como lo hicieron los 649 caídos que desde el cielo seguramente velan porque usted los recuerde.

Debemos trabajar incansablemente en restablecer una nueva relación entre el Ejército Argentino y el pueblo. Es imposible hacer una nación grande y justa sin la unión natural que debe haber entre la sociedad civil y militar. Nos debemos una charla reconciliadora. Es inconcebible que continuemos divorciados con nuestras fuerzas, una relación madura es posible; por ello debemos trabajar. Y Malvinas, como causa Nacional que efectivamente es, puede llegar a ser uno de los caminos a esa unión tan añorada por nosotros.

A su vez, la injusta respuesta del pueblo todo al regreso de estos HEROES no puede continuar pasado 25 años. Es nuestra obligación como argentinos rendirles el mayor reconocimiento que en esta tierra se puede hacer a un ser viviente: el agradecimiento. Ellos no nos preguntaron si era correcto o no pelear por la Patria. Lo hicieron “por conciencia nacional, por procedencia popular, por convicción personal y por apasionada solidaridad y gratitud a nuestro pueblo”. Por ello es nuestro deber amarlos y protegerlos.



ES NUESTRO DEBER, “Si así no lo hiciésemos que Dios y la patria nos lo demanden…”



NOTA DE P. DE H: Saludamos y felicitamos a los compañeros y amigos de Perón Vence al Tiempo por su recuerdo constante y su militancia patriótica por la reivindicación de la soberanía argentina en nuestras islas Malvinas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Por qué estuvo bien votar a favor de Chile en el plebiscito del Beagle y no está bien dejarle las islas Falkland a los habitantes que las ocupan por generaciones desde mucho antes que nuestros abuelos llegaran de italia, españa, etc.?